El tren subterráneo de Londres, o "tubo" como se le conoce, fue el primer ferrocarril subterráneo urbano del mundo. Inició sus operaciones en 1863, cuando el Ferrocarril Metropolitano abrió una línea entre Paddington y Farringdon. En ese época, los trenes eran operados a vapor y los viajes eran sucios, azufrados y extremadamente incómodos comparados con los trenes eléctricos de la actualidad.
EL HOMBRE QUE CALCULABA
2 years ago